UN RENDEZ-VOUS ENTRE LA ALTA RELOJERÍA Y LA ALTA JOYERÍA
Tres nuevos modelos originales se suman a la elegante y atemporal colección Rendez-Vous, presentando una nueva fusión entre la alta relojería y la alta joyería. Estas piezas icónicas destacan la maestría relojera de Jaeger-LeCoultre y exhiben sus característicos Oficios Extraordinarios “Métiers Rares®”, como el guilloché, el engastado de gemas y las artes decorativas. Aunque de apariencia clásica, en el corazón de estas tres nuevas creaciones de Rendez-Vous late una audaz propuesta relojera que reinterpreta poéticamente diversas funciones femeninas que han definido el carácter de la colección desde sus inicios. Esta colección excepcional está pensada para mujeres de todo el mundo que eligen hacer de cada hora del día y la noche un momento raro y precioso.
Rendez-Vous Tourbillon
Una complicación icónica, ricamente adornada con oro y diamantes
Una vez más, el nuevo Rendez-Vous Tourbillon cautiva a mujeres dinámicas que aman rodearse de piezas refinadas que brillan con una confianza discreta. A las 6 en punto, el tourbillon revela su espectacular y complejo sistema de engranajes, decorados mayormente a mano. Suspendido aparentemente en el aire, su volante oscila dentro de la jaula para completar una revolución cada 60 segundos, marcando el ritmo de su movimiento automático de alta precisión, el calibre Jaeger-LeCoultre 978.
Un legado relojero que brilla por siglos
El tourbillon no necesita presentación. Pero en cada nueva interpretación diseñada por los ingenieros y artesanos de la Grande Maison, esta complicación ofrece un espectáculo cautivador, casi hipnótico. El halo de diamantes talla brillante que adorna el bisel acentúa esta sensación, reflejada también en el centro de la esfera y alrededor del tourbillon. Su ornamentación expresa la herencia noble de los Oficios Extraordinarios “Métiers Rares®” ejecutados por generaciones de artesanos en la Manufactura, incluyendo los 215 diamantes engastados a mano, que requieren muchas horas de meticulosa atención en el taller “Métiers Rares®”.
Con modelos en oro rosa realzados por el brillo iridiscente de la madreperla, una feminidad delicada y vibrante emana desde el centro de la esfera del nuevo Rendez-Vous Tourbillon. Sus materiales preciosos convierten el reloj en una joya que destella en la muñeca y marca el paso encantado del tiempo.
Rendez-Vous Celestial
Una estrella ilumina un entorno sofisticado
Equipados con el calibre Jaeger-LeCoultre 809/1, estas dos nuevas interpretaciones del Rendez-Vous Celestial destacan una función icónica que encarna plenamente el nombre de la colección. Mientras recorre su curso constante, la misteriosa estrella recuerda el momento de un próximo encuentro.
Alta joyería con alma astral
Un mapa celeste, la máxima función femenina, está rodeado por un bisel deslumbrante engastado con un degradado de zafiros rosas que se transforman en amatistas o bien con diamantes talla brillante. Realzado por una estrella en movimiento constante, el dial muestra las constelaciones cambiantes y los signos del zodiaco, esmaltados en tonos oro rosa o plata que invitan a perderse en el cielo estrellado.
Además del engaste de piedras preciosas, los números florales esmaltados y las doce constelaciones perpetúan las tradiciones de los Oficios Extraordinarios “Métiers Rares®”. Para continuar con el espectáculo brillante durante la noche, estos dos relojes joya cobran vida al anochecer.
Al reflejar los valores de la alta joyería, estos tres nuevos modelos complementan una colección creada por primera vez en los talleres de la Manufactura en 2012. Es una colección femenina en todos los sentidos, pensada para realzar a las mujeres del presente y del futuro que viven en completa armonía con su tiempo. Vestido con esta decoración deslumbrante, Rendez-Vous sigue invitando al descubrimiento pausado de tesoros constantemente reinventados en múltiples formas. Movimiento automático de alta precisión, engaste de gemas preciosas, acabados refinados y la aura segura de sus números florales hacen de este un Rendez-Vous imperdible.
Acerca de Jaeger-LeCoultre
Nacimos en La Vallée de Joux, en las montañas suizas, en 1833.
Desde el primer día, cada reloj —desde el calibre hasta la caja— es diseñado, fabricado y ensamblado en nuestra Manufactura por nuestros maestros relojeros. Esto exige inventiva, determinación, arduo trabajo y valentía. Cuánto tiempo toma no importa. Lo que importa es cuánto tiempo durará. Ese es el espíritu del creador.
