Nuevas incorporaciones a la línea Fifty Fathoms Bathyscaphe
Blancpain desvela tres nuevos relojes de su colección Fifty Fathoms. Los recién llegados, que adoptan el estilo deportivo y característico de los modelos Bathyscaphe de cerámica negra, completan la línea con un cronógrafo flyback y dos modelos de tres agujas y fecha. Con el fin de ofrecer un amplio abanico de combinaciones posibles, estos nuevos relojes de esferas sorprendentes están disponibles con diferentes correas y brazaletes, incluido uno presentado en los últimos meses de cerámica de alta tecnología.
El modelo Bathyscaphe, diseñado para lucirlo a diario y, al mismo tiempo, para explorar el fondo marino, nació en 1956 como el alter ego urbano del emblemático Fifty Fathoms. Esta línea colorida y versátil es un auténtico camaleón urbano, capaz de adaptarse tanto a un día en la oficina como a una escapada deportiva o a una velada formal. Los nuevos modelos Bathyscaphe refuerzan este carácter todoterreno gracias a la cerámica de alta tecnología que les confiere su resistencia, al tiempo que completan la familia con sus rostros animados por matices solares.
Contrarrestar la imponente identidad de la cerámica negra utilizada para las cajas de estos nuevos modelos supone todo un reto. Sin embargo, las esferas desarrolladas por Blancpain lo superan con creces. Sus sutiles degradados y acabados rayos de sol generan un equilibrio único y un juego de luces excepcional. Una esfera de color verde intenso da vida al primer reloj de tres agujas y fecha, mientras que un tono azul, que evoca los rayos del sol que atraviesan las profundidades del mar, adorna el segundo modelo, así como el cronógrafo flyback.
Los nuevos Bathyscaphe, que miden 43,6 mm de diámetro y funcionan con los resistentes calibres de alto rendimiento 1315 —en el caso de los modelos de tres agujas y fecha— y F385 —en el caso del cronógrafo flyback—, se mantienen fieles a su legado de reloj de buceo, con un bisel giratorio unidireccional y una estanqueidad garantizada hasta 30 bares. Con la presentación de estos nuevos modelos, la línea Fifty Fathoms Bathyscaphe dinamiza su colección de relojes de cerámica estrenada a principios de este año. Ahora, propone tres referencias (cronógrafo flyback; tres agujas y fecha; y calendario completo con fases de la luna) con tres esferas diferentes (azul, verde y negra) y una nutrida selección de brazaletes y correas (tela de vela, cerámica y NATO).
Calibre 1315: precisión, fiabilidad y rendimiento
El calibre de manufactura 1315 anima los nuevos modelos Bathyscaphe de tres agujas y fecha. Este movimiento automático, de rendimiento cronométrico inigualable, se diseña, construye, produce, ensambla y ajusta en interno, como todos los movimientos que impulsan los relojes Blancpain. Además de contar con una extraordinaria y constante reserva de marcha de cinco días gracias a tres barriletes montados en serie, dispone de una función de parada del segundero para una puesta en hora extremadamente precisa. Este calibre, equipado con una masa oscilante de oro de 18 quilates con revestimiento NAC, está decorado conforme a la tradición de la Alta Relojería.
Calibre F385: alta frecuencia, alta precisión
El calibre Blancpain F385 de alta precisión, que alberga el Bathyscaphe Chronographe Flyback, cuenta con un complejo y prestigioso sistema de rueda de pilares con embrague vertical, que garantiza que el cronógrafo se ponga en marcha y se detenga de forma impecable y fluida. Posee una frecuencia de 5 Hz, una reserva de marcha de 50 horas y una precisión de 1/10 de segundo. La función flyback permite reiniciar el cronometraje en curso y poner en marcha uno nuevo con una sola pulsación, a diferencia de un cronógrafo convencional, que requiere tres pulsaciones —en dos pulsadores diferentes— para detener, reiniciar y volver a poner en marcha el mecanismo.
Cerámica: un material deportivo y resistente en sintonía con la línea Bathyscaphe
La línea Bathyscaphe, con su marcada identidad, joven y dinámica, destaca por su aspecto deportivo y contemporáneo. Gracias a un carácter atrevido e innovador, constituye el escenario perfecto para las innovaciones tecnológicas de Blancpain. La cerámica de alta tecnología, fiel a este espíritu, se convierte en uno de los materiales ideales para esta línea. Este material, duradero, extremadamente resistente a los arañazos e hipoalergénico, es casi cinco veces más duro que el acero inoxidable, pero un 25 % más ligero. Por tanto, resulta la opción ideal para el uso diario, ya que evita que el usuario tenga que vigilar hasta el último detalle de sus movimientos. Asimismo, al reducir su volumen en un 25 % durante la cocción (a más de 1400 °C), refleja el lado experimental e innovador de la línea. La cerámica de alta tecnología de Blancpain se combina con unos acabados excepcionales, obra de los especialistas de la marca, y juega con la luz de un modo incomparable. Así, refleja la estética contemporánea de la línea Bathyscaphe.
Un complejo brazalete de cerámica patentada
La fabricación de un brazalete de alta gama de cerámica es muy compleja. Dado que el brazalete resultaría poco estético si los eslabones quedaran demasiado sueltos y podría romperse si estuvieran demasiado apretados, es preciso ajustar los eslabones a la perfección según unas tolerancias muy estrictas. El brazalete de cerámica negra de Blancpain, que incorpora un sistema patentado de ensamblaje de los eslabones con clavijas en forma de leva —para que no se toquen ni se rompan—, es el resultado de tres años de investigación y desarrollo para ofrecer un confort ideal y una resistencia extraordinaria.
Durante una inmersión en 1952, Jean-Jacques Fiechter, copresidente de Blancpain en aquel momento, se quedó sin aire y tuvo que efectuar un ascenso de emergencia que casi le cuesta la vida. Su innovadora solución consistió en equipar el Fifty Fathoms lanzado en 1953, el primer reloj de buceo auténtico, con un bisel giratorio, graduado y bloqueable, especialmente adaptado a las condiciones del buceo.
En la actualidad, la colección Fifty Fathoms consta de un bisel unidireccional que gira solo en sentido antihorario para mayor seguridad. Al igual que su hermano mayor, el Fifty Fathoms, el modelo Bathyscaphe también presenta este tipo de bisel, en el que se inspira. Los tres nuevos relojes no son una excepción. La inserción, situada en el bisel de cerámica negra, combina con el color de la esfera: de un negro potente o un verde intenso, adornada con índices de Liquidmetal® gris para acentuar el contraste, acompaña a los fascinantes degradados efecto rayos de sol de color azul o verde. El bisel, de aspecto decididamente urbano, garantiza una gran resistencia a los arañazos y emite un claro y enérgico «chasquido» al manipularlo.
La revolución del silicio
El silicio, que protagonizó una auténtica revolución en la industria relojera a principios del siglo XXI, ha propiciado importantes avances en materia de medición del tiempo. Este material elástico que no se deforma, duro, ligero y muy resistente a la corrosión, se distingue especialmente por su resistencia al magnetismo, una cualidad muy ventajosa para garantizar el funcionamiento preciso de los relojes.
A diferencia de los años 1950, cuando los volantes de los relojes se equipaban con resortes metálicos que podían magnetizarse —de ahí el desarrollo de una caja interna de hierro dulce para proteger el movimiento del magnetismo—, los Fifty Fathoms actuales se dotan de una espiral de silicio, lo que permite incorporar un fondo de cristal de zafiro para dejar a la vista la construcción única del movimiento. Gracias a esta tecnología y a este material, además de mostrar con orgullo la alta calidad de los acabados de su mecanismo, los tres nuevos Bathyscaphe ofrecen un rendimiento cronométrico superior.