La innovadora casa relojera, cuyo fundador marcó un antes y un después con la invención del tourbillon, suma un nuevo modelo a su icónica colección Marine.
El tourbillon vio la luz oficialmente el 26 de junio de 1801, gracias a la perspicacia científica y relojera de Abraham-Louis Breguet. Este visionario relojero observó que la gravedad terrestre afectaba a la regularidad de los movimientos de los relojes de la época, que solían llevarse de manera vertical. Las variaciones en la regulación eran provocadas por la gravedad, generando un problema que Breguet resolvió ingeniosamente al idear una solución única: colocar el conjunto del escape en una jaula móvil que giraba completamente cada minuto. Esta innovación aseguraba la reproducción regular de todas las variaciones y su compensación mutua. Además, el constante cambio del punto de contacto de los pivotes del volante en sus cojinetes de rubíes garantizaba una lubricación óptima. Así nació el tourbillon. Más de 220 años después, este mecanismo relojero sigue siendo una de las creaciones más fascinantes. Breguet rinde homenaje a esta invención al incorporarla a su colección Marine.
La caja de 42,5 mm alberga el calibre de carga automática 581, un movimiento extrafino de 3 mm de grosor compuesto por 330 componentes. La delgadez de este movimiento se logra gracias al uso del rotor periférico. El volante late a una frecuencia de 4 Hz y cuenta con una impresionante reserva de marcha de 80 horas. Para incorporar las últimas innovaciones, el calibre incluye una jaula de titanio y una espiral de silicio, un material resistente a la corrosión, al desgaste y a la influencia de campos magnéticos. Los acabados del movimiento se revelan a través del fondo de zafiro de la caja, mostrando la rosa de los vientos en el tambor del barrilete y otras decoraciones características de la línea Marine, como las côtes droites.
La esfera soleada de las referencias 5577 presenta un tono pizarra en la versión de oro rosa y azul marino en la de platino. El tourbillon, ubicado a las 5 en punto, atrae la atención con su jaula giratoria cada 60 segundos. Para destacar este mecanismo, la circunferencia de las horas está descentrada. Finalmente, los índices y las agujas de oro Breguet de tipo pomme son luminiscentes.
Reconocido como un científico y técnico excepcional, Abraham-Louis Breguet se unió a la Marina francesa en 1814 al ser nombrado miembro de la Oficina de Longitudes por decreto real. Este organismo se dedicaba a resolver problemas relacionados con la determinación de la longitud en el mar mediante la astronomía. Un año después, el rey Luis XVIII le otorgó el prestigioso título de Relojero de la Marina Real. Desde entonces, las flotas de los más grandes exploradores navegaron equipadas con sistemas de cronometría firmados por Breguet. Este nuevo reloj es, por tanto, un doble homenaje al fundador de la marca, tanto por sus vínculos con la navegación marítima como con la astronomía.